Las pequeñas distracciones al volante también favorecen la siniestralidad
Smart Radio 16 Agosto 16 2018
Las pequeñas distracciones al volante también favorecen la siniestralidad
Es común que los automovilistas al internalizar la práctica de conducir reproduzcamos una automatización que nos lleva a cometer infracciones. Cuando recién comenzamos a manejar, prestamos atención a todo, guiados por la precaución. La necesidad de aprender los avatares de la conducción nos obligan a ser cautos, más allá de la natural inexperiencia.
Pero ni bien asumimos cierta seguridad y mecanizamos los movimientos, que suele suceder entre los primeros tres y cinco años, les damos camino a las pequeñas desatenciones, que muchas veces se traducen en siniestros viales. Existen prácticas permitidas pero desaconsejadas que nos pueden llevar a cometer un siniestro evitable, como dejar de prestar atención al volante por escuchar música muy alta, mirar un cartel de publicidad llamativo, una discusión o una charla vehemente dentro del vehículo, fumar o tomar mate. Desatenciones que comentemos al sobreestimar nuestra seguridad al volante.
Según el último informe del Observatorio Vial de la Cecaitra (Cámara que presido y representa a las empresas productoras de software vial en nuestro país), relevado con 1714 casos, 2 de cada 10 de los consultados consideró que la falta de atención o de cuidado de los conductores cuando manejan es la principal causa de accidentes en el país. El 36% dijo que la natural "transgresión a las normas de tránsito por parte de los conductores" es la causa principal. Un 23% se inclinó por responsabilizar a "la existencia de conductores alcoholizados". Esas fueron las opciones más escogidas.
Un auto es un bólido que puede llegar a pesar más de una tonelada y su manipulación conlleva una responsabilidad que no terminamos de asumir en su verdadera dimensión.Tanto es así que si el conductor está alcoholizado y sin buscarlo acomete contra alguien, se lo puede llegar a considerar penalmente como un homicidio simple con dolo eventual u como homicidio culposo.
Algunas cuestiones prohibidas como consultar el celular, sin embargo, los argentinos reconocemos hacerlo, porque no consideramos que sean tan graves. El 33% de los relevados en la encuesta antes citada realizada por nuestra Cámara aceptó que mira su teléfono en el semáforo.
El respeto a las velocidades máximas y mínimas es un tema al que nuestra Cámara le presta particular importancia porque un desmanejo a esa velocidad puede aumentar el índice fatal, por demás alto en nuestro país. Para la asociación civil Luchemos por la Vida, que trabaja con valor estos temas, los muertos en siniestros durante el año pasado se contaron por 7203. En el relevamiento del Observatorio Vial, sin embargo, uno de cada cuatro conductores reconoce que siempre o de vez en cuando supera las velocidades máximas indicadas en los carteles.
Desde la Cecaitra trabajamos incansablemente para que la siniestralidad vial no represente esta epidemia que vivimos en las calles de nuestro país. Tenemos que tomar conciencia que respetar las normas, por más pequeñas que nos parezcan, salva vidas. Y que al momento de tomar un volante no solo tenemos la necesidad de trasladarnos si no la responsabilidad de respetar la vida.
El autor es presidente de la Cámara de Empresas de Software Vial, Cecaitra.
